

Hoy compartimos una interesante historia desde la comunidad dothegap. Hace poco tuvimos la oportunidad de entrevistar a la sobrina de Sébastien, empleado de FAIN, (empresa asociada a dothegap para la gestión de su propia comunidad internacional), que acaba de realizar unas fascinantes prácticas de seis meses en Madrid. Esta experiencia única le ha permitido no sólo adquirir conocimientos profesionales, sino también sumergirse profundamente en la cultura española mediante su estancia en casa de una familia anfitriona. Exploremos su viaje…

Comenzamos con su llegada a España
¿Qué te motivó a pasar unos meses viviendo en España?
«Tuve una oportunidad profesional ya que necesitaba realizar unas prácticas de seis meses para terminar mis estudios. Esto me permitió no sólo descubrir el entorno laboral, sino también vivir de primera mano la experiencia de estar en España. No era algo que tuviera planeado; jamás imaginé que algún día acabaría viviendo aquí. Pero cuando supe que podía hacer las prácticas en Madrid, me ilusioné muchísimo.»
¿Cómo fue tu primera impresión al llegar a casa de tu familia anfitriona?
«Desde el primer momento me sentí muy cómoda; hicieron todo lo posible para que me sintiera como en casa. Todos fueron increíblemente amables y acogedores. Incluso me ofrecieron un tour por Madrid nada más llegar lo que me ayudó muchísimo a integrarme y a conectar con el ambiente desde el principio.»
Sobre el día a día
¿Cómo es un día normal para ti con tu familia española?
«Por la mañana, desayunamos todos juntos, luego los niños van al colegio y nosotros vamos a la oficina. Volvemos a casa sobre las 2 de la tarde para comer juntos. Después, tengo tiempo libre: a veces salimos todos a explorar la ciudad o a probar restaurantes típicos, y a veces salgo yo sola. Por la noche, cenamos todos juntos sobre las 22.00 h».

¿Qué diferencias has notado entre la vida cotidiana en Francia y aquí?
«Para mí, la mayor diferencia es sin duda el horario de las comidas. En Francia, solemos comer hacia el mediodía o como muy tarde a las 12 horas, pero aquí la hora normal es más bien las 2 de la tarde o incluso más tarde. La cena también es bastante entrada la noche».
¿Qué es lo que más te ha sorprendido de vivir con una familia española?
«Lo que más me sorprendió fue la amabilidad y la calidez. Descubrí que compartíamos muchos momentos juntos, como largas y animadas comidas, y que realmente nos tomábamos nuestro tiempo para hablar.»
¿Hay algún hábito o costumbre que te haya parecido especialmente interesante o diferente?
«Me parece realmente hermoso cómo la cultura sigue estando tan presente en la vida cotidiana de los españoles: en sus celebraciones, la comida tradicional, el valor que dan a la familia, la música y la danza.»
¿Cómo ha sido la relación con tu familia de acogida? ¿Qué es lo que más aprecias de ellos?
«La relación con mi familia de acogida fue increíble. Como ya he dicho, me sentí bien acogida desde el principio y, aunque soy un poco tímida por naturaleza, no tardé en sentirme cómoda. Lo que más aprecié fue que siempre me invitaban a las comidas familiares y a los encuentros de trabajo. Nunca me dejaban sola, e incluso en ocasiones familiares más privadas, siempre se ofrecían a incluirme. Incluso con las chicas que eran un poco más jóvenes que yo, conseguimos establecer una conexión real.»
Alimentación y lengua
¿Qué platos españoles te han encantado? ¿Y cuál ha sido el más difícil de probar?
«Me ha encantado la tortilla. Creo que es increíble. Me gustó mucho el pan con tomate y me gusta que sea algo que se pueda tomar para desayunar. También me gustó mucho el gazpacho, sobre todo con el calor porque es muy refrescante. En realidad, no encontré ningún plato especialmente difícil de probar; todo me resultó bastante fácil de degustar».
¿Cómo ha mejorado tu español durante este tiempo?
«Mi español ha mejorado bastante: he ampliado mi vocabulario y ahora entiendo mucho mejor cuando los españoles me hablan, algo que al principio me resultaba muy difícil. Durante los primeros días me sentía completamente perdida. Es verdad que podría haber progresado aún más, pero a menudo recurría al inglés para superar la barrera del idioma. Aun así, me he dado cuenta de que es fundamental esforzarse por hablar español, tomarse el tiempo necesario y no optar siempre por el camino fácil.»

¿Qué palabras o expresiones nuevas has aprendido que te gusten de verdad?
«Me hace mucha gracia que entre mis compañeros de prácticas se llamen ‘tía’; es algo muy divertido e informal. También me encanta que usen apodos cariñosos como ‘guapa’, que hacen que el ambiente sea más cercano y agradable.»
Impresiones duraderas: El impacto de mi experiencia de prácticas en España
¿Qué es lo que más echarás de menos cuando vuelvas a Francia?
«Lo que más echaré de menos es a las personas que he conocido: los otros becarios, mi familia de acogida, el modo de vida español e incluso el gazpacho en verano. Simplemente echaré de menos la vida que tuve aquí, porque ha sido realmente increíble».
¿Qué consejo darías a otros jóvenes que quieran vivir una experiencia similar?
«Recomendaría vivir la experiencia al máximo y disfrutar de cada momento. Es importante atreverse a hablar con la gente, porque la mayoría de las personas hacen un esfuerzo por entenderte. Nadie se va a reír de ti, así que no tengas miedo de equivocarte al pronunciar o de no encontrar las palabras correctas. Lo esencial es intentarlo. También hay que tener claro que no todos los días serán perfectos: habrá momentos difíciles, y es normal echar de menos a tus seres queridos. Pero esos bajones suelen pasar rápido. En este tipo de experiencias siempre conoces gente nueva, descubres cosas distintas y aprendes muchísimo. Por eso, hay que saborear cada instante, porque estas vivencias te marcan y te acompañarán toda la vida.»
¿Cómo crees que esta experiencia ha cambiado tu forma de ver el mundo?
«He crecido y evolucionado; he adquirido más confianza en mí misma, sobre todo porque me asignaron tareas importantes dentro de la empresa. También tuve la oportunidad de hablar con personas mayores que yo y con más experiencia, de las que he aprendido mucho. Y hablando simplemente de estar en otro país y descubrir una nueva cultura, definitivamente me ayudó a comprender mejor cómo viven otras personas. Nos permite salir de nuestra propia perspectiva y ampliar nuestra visión del mundo».

Una experiencia realmente enriquecedora
Un enorme agradecimiento a la sobrina de Sébastien por compartir su inspiradora experiencia de prácticas en España. Su viaje ilustra a la perfección cómo cada experiencia es única y, en su caso, ha sido una oportunidad excepcional para sumergirse en una nueva cultura mientras adquiría valiosas competencias profesionales. Esperamos que su historia inspire a emprender aventuras internacionales similares.